La evolución en India

Bajaj Auto, fundada en 1945 en India como una empresa importadora de vehículos, comenzó su relación con Vespa en 1959 al obtener una licencia de Piaggio para fabricar scooters en el país. En 1960, lanzó la Vespa 150 bajo esta colaboración, marcando el inicio de su incursión en la producción de dos ruedas. La relación con Piaggio duró hasta 1971, cuando el acuerdo expiró tras disputas legales, ya que Piaggio acusó a Bajaj de usar sus diseños después del contrato. A partir de entonces, Bajaj desarrolló sus propios scooters, destacando el Bajaj Chetak en 1972, inspirado en la Vespa Sprint, que se convirtió en un ícono en India con el lema «Hamara Bajaj» y largas listas de espera.

«Hamara Bajaj» significa «Nuestro Bajaj» en hindi, donde «hamara» se traduce como «nuestro» y «Bajaj» es el nombre de la marca. Este eslogan, lanzado en la década de 1980, se usó en campañas publicitarias para promover sus scooters, especialmente el icónico Bajaj Chetak. La frase buscaba evocar un sentido de orgullo nacional y pertenencia (curiosa pertenencia…) entre los indios, posicionando a Bajaj como una marca cercana al pueblo, casi como un símbolo de la identidad india en el transporte. El eslogan resonó profundamente, asociando los productos de Bajaj con la vida cotidiana y la aspiración de la clase media, lo que contribuyó a su enorme popularidad en esa época.